Reprogramando mi mente para el reino de Dios

Cada reino se fundamenta en la persona de su rey. El rey de cada reino es la fuente de donde los habitantes del reino comen y beben, el rey es quien cubre a total satisfacción y plenitud cada necesidad de su pueblo.

En contraste y oposición al reino de Dios, está el reino de las tinieblas. En este reino como en Egipto, su rey es faraón. Existe un grave conflicto que enfrenta a Dios con faraón. Pues faraón se ha interpuesto en su propósito como su adversario, en hebreo: Ha-Satán. Sus esclavos -de faraón- viven muy ocupados, siempre trabajando, todo el tiempo, sin descanso y sin adorar a Dios.

Dios mismo, ha convocado a su pueblo a una cita para que puedan observar y deleitarse en sus maravillas, pero su pueblo no puede acudir, no puede escuchar ni observar, no pueden adorar juntos. Todo aquello que se opone a Dios pertenece al reino de las tinieblas. Sus esclavos y cautivos siempre viven preocupados, ansiosos y stressados por su comida y su vestido de mañana. Al contrario en el reino de Dios, donde Jesús reina no funciona así:

Ya no se preocupen por lo que van a comer, o lo que van a beber, o por la ropa que se van a poner. Sólo los que no conocen a Dios se preocupan por eso. Ustedes tienen como padre a Dios que está en el cielo, y él sabe lo que ustedes necesitan. Mateo 6:31-32

Si en el reino de Dios todas y cada una de las necesidades del humano son saciadas a plenitud. ¿Cómo haré para lograr mi entrada a este reino? ¿Cómo salgo de este reino de ansiedad y stress? Solamente existe una manera. Debo nacer dentro del reino de Dios, debo volver a nacer en mi espíritu, debo ser regenerado en mi espíritu. Todos recordamos la noche en que Nicodemo se reunió con Jesús y se escuchó de su boca la Palabra que puso de cabeza su vieja mentalidad del antiguo reino. La ciudadanía del reino de Dios se obtiene solo por nacimiento:

Jesús le contestó: —Te digo la verdad, nadie puede entrar en el reino de Dios si no nace de agua y del Espíritu. El ser humano solo puede reproducir la vida humana, pero la vida espiritual nace del Espíritu Santo.  Juan 3:5-6

Existen dos tipos de seguidores de Jesús: La multitud, los que viven ansiosos y tensos por lo que deben comer, beber y vestir. Y los que conocen los secretos del reino; los sacerdotes y reyes del reino de Dios que durante el milenio de gobierno de Jesús (Rey de reyes) en la tierra serán sus reyes. Los stressados, esa multitud hambrienta no busca el reino de Dios, solo buscan saciarse.

A partir de entonces, Jesús comenzó a predicar: «Arrepiéntanse de sus pecados y vuelvan a Dios, porque el reino del cielo está cerca. El primer anuncio acerca del reino de Dios convoca a todos; tanto a la multitud y a los reyes y sacerdotes por igual. Jesús, declaró en Mateo 4:17 que es urgente que los humanos cambiemos nuestra vieja mentalidad y disposición mental acerca de Dios. Nos pide cambiar. Sacar totalmente lo viejo y tomar por completo lo nuevo y diferente. Jesús dijó: Metanoéo, adquirir la nueva mentalidad o arrepentirse. La mentalidad, es un conjunto de creencias y costumbres que forman la manera de pensar, valorar la realidad y actuar. Lo que piensas te define, tus ideas adoptadas aquí en la tierra guían tu vida a la muerte o a la vida.

Si fuéramos -Usted y yo- un teléfono inteligente de hoy. Para ser útiles y funcionales tendríamos que comprar y descargar nuevas Apps productivas que corran sobre el actual sistema operativo de este dispositivo. Las mejores Apps se deben pagar. En el sistema del mundo se pagan con el cargo adicional, un extra o plus; se acompañan de tristeza y del dolor.

En contraste. En el reino de Dios, las mejores y más poderosas Apps de productividad espiritual son gratuitas. El rey del reino de Dios las regala -son donaciones- para que puedan ser ampliamente operadas por su nación de reyes y sacerdotes. ¿Entiendes cómo funcionan tus dones espirituales? Tú siembras hoy en el mundo espiritual y vienes a cosechar mañana en el mundo material. Es un asunto de quien prevalece sobre quién, quién gobierna a quién. Si tu espíritu prevalece sobre tu carne. Así, cosecharás justicia del reino de Dios, la paz de Dios y el gozo de Dios.

La demanda de Dios para ti y para mí es: Sacar lo viejo e instalar en tu corazón la nueva mentalidad de Cristo. Sobre la mentalidad de Cristo -conocimiento de Cristo- van a correr las aplicaciones del reino de Dios, no pueden funcionar si todavía tienes el sistema de pensamientos del reino de las tinieblas, debes salir completamente de Egipto. El sistema operativo de esclavo de las tinieblas produce en ti y en mí pensamientos y fortalezas de escasez, limitaciones, enfermedad y muerte, insatisfacción, dolor, temporalidad… ¿Qué harás? ¿Los tiras o los guardas?

Mi mente y mis sentidos han estado funcionando en ese viejo sistema, atados a ese sistema. Sus pensamientos; esos archivos en mi memoria siguen activos. Pero al intentar correr los dones espirituales sobre una mentalidad carnal y terrenal no hay resultados espirituales plenos que transciendan al mundo material; así que vives una profunda sequía de milagros en tu vida.

He descubierto que me pasa algo. ¿Será que también te ha ocurrido a ti? O al apóstol Pablo. Cada vez que intento hacer el bien, no puedo y produzco maldad. Esto confirma lo que tienes instalado dentro de ti. Hay trozos muy grandes del código del sistema operativo de las tinieblas -todavía- arraigados en tu corazón. Eso nos dice Pablo: Quiero hacer lo que es bueno, pero no lo hago. No quiero hacer lo que está mal, pero igual lo hago. Ahora, si hago lo que no quiero hacer, realmente no soy yo el que hace lo que está mal, sino el pecado que vive en mí. He descubierto el siguiente principio de vida: que cuando quiero hacer lo que es correcto, no puedo evitar hacer lo que está mal. Romanos 7:19-21.

Pablo, ha tenido que cambiar su mentalidad. Ha desechado la vieja mentalidad del reino de las tinieblas; la mente carnal. Por la mentalidad de Cristo, el conocimiento de Cristo. En esa época pensaba que todo eso era muy valioso, pero gracias a Cristo, ahora sé que eso no tiene ningún valor. Filipenses 3:7

Solo si tienes esta nueva mentalidad podrás derrotar las viejas fortalezas y pensamientos del sistema del reino de las tinieblas que produce esclavos. Es cierto que vivimos en este mundo, pero no luchamos como los seres humanos que viven en él. Las armas con las que luchamos no son de este mundo, sino que tienen el poder de Dios para destruir las fortalezas del enemigo. Con nuestras armas, también destruimos los argumentos de los que están en contra nuestra y acabamos con el orgullo que no le permite a la gente conocer a Dios. Así podemos capturar todos los pensamientos y hacer que obedezcan a Cristo. 2 corintios 10:3-5
Entonces, ¿Cómo van a operar a través de mi los dones espirituales (Apps espirituales del reino de Dios) que he recibido sin costo? Ahora sí van a funcionar, ahora sí veré su poder manifiesto, hoy sí veré los milagros, y habrá muchas nuevas razones para adorar a Dios. A ti, Pedro, te daré autoridad en el reino de Dios. Todas las cosas que tú prohíbas aquí en la tierra, desde el cielo Dios las prohibirá. Y las cosas que tú permitas, también Dios las permitirá. Mateo 16:19

¿Y qué hay -entonces- de esos grandes retos que se oponen a Dios y a su plan perfecto? Les digo la verdad: Cualquiera que le diga a esta montaña: “Levántate y lánzate al mar” y no dude en su interior sino que crea que sucederá lo que dice, así se hará. Marcos 11:23

¿Ahora lo entiendes? Sí. Entiendo bien y claro. ¿Cuáles son entonces, los retos para que mi espíritu gobierne mi carne? Cambiar la disposición de mi mente, sacar el viejo sistema de esclavo de mi corazón que está ahogando mi fe y su poder, y ahora observar a Dios obrar poderosamente. Hoy sí, ya estoy listo para adorar en Espíritu y en verdad.