Imagina por un instante que tu casa se localiza justo al lado de una enorme central hidroeléctrica, ésta es capaz de producir enormes cantidades de energía para todo el país, sin problema por muchos años, todos los que te quedan. Pero por alguna razón, la instalación eléctrica dentro de tu casa ha estado sin el mantenimiento adecuado. Así que sufres cortes de energía arbitrarios, sin aviso previo. Como respuesta, te pasas llamando al número de servicio al cliente de la empresa de energía, para "quejarte" por la falta de poder. Para finalmente, después de meditar bien el asunto, descubrir que no hay nada de malo en la enorme fuente de energía, la falla está en la caja de fusibles de casa. Porque el Espíritu de Dios no nos hace cobardes. Al contrario, nos da poder para amar a los demás, y nos fortalece para que podamos vivir una buena vida cristiana . 2 Timoteo 1:7 Capacidad de poder. Podemos hacer aquello que nos toque enfrentar en la vida gracias a este poder ilimitado. Di