Ir al contenido principal

Renovando el aceite de mi lámpara.

Tarjeta de invitación a una boda

Alguna vez escuché a un anciano líder cristiano expresar que el día que lleguemos -por fin- al cielo, ese día en particular, será un día de grandes sorpresas.

»No todos los que dicen que yo soy su Señor y dueño entrarán en el reino de Dios. Eso no es suficiente; antes que nada deben obedecer los mandamientos de mi Padre, que está en el cielo. Cuando llegue el día en que Dios juzgará a todo el mundo, muchos me dirán: “Señor y dueño nuestro, nosotros anunciamos de parte tuya el mensaje a otros. Y también usamos tu nombre para echar fuera demonios y para hacer milagros”. Pero yo les diré: ¡Apártense de mí, gente malvada! ¡Yo no tengo nada que ver con ustedes!  Mateo 7:21-23

Nos va a sorprender que veremos a personas que nunca esperábamos encontrar allá, pero un poco más nos va a sorprender descubrir que algunos que dábamos por hecho encontrar, nunca llegaron allá. Y  los que lleguen allá deberán buscar su nombre en una lista.

El ángel me dijo: «Escribe esto: Benditos sean todos los que han sido invitados a la cena de bodas del Cordero.» Apocalipsis 19:9

Si Usted alguna vez ha realizado un viaje por la carretera o bien por una autopista muy temprano por la mañana, quizá se haya encontrado con algo de niebla sobre el pavimento. Esta niebla resulta visible y causa alguna breve distracción al manejar sobre el asfalto frio y húmedo. Al salir el sol y calentar el camino, la niebla simplemente se va. No queda rastro de su presencia, pues se disipa muy fácilmente.

Si ha tomado un paseo por el campo es posible descubrir algunas atractivas flores temprano, justo después del amanecer, y que a la mitad de la mañana ya no se pueden ver, pues se han secado con el sol. En casa de mi madre existe un jardín, allí hay una flor blanca y grande que aparece una sola noche cada año, resulta espectacular si Usted la encuentra esa noche, pero al amanecer está totalmente marchita. Si comparas las fotos de la noche y de la mañana descubrirás un alto contraste entre ambas imágenes. Hay muchas cosas que resultan ser fugaces y de breve existencia, poseen un alto atractivo y de allí que sean muy deseadas, más no son valiosas, ni permanecen por largo tiempo.

He tenido la oportunidad de crecer en el llamado tercer mundo, fuera de los EUA y de Rusia, en mi ciudad de casi dos millones de habitantes frecuentemente enfrentamos cortes en el fluido eléctrico, la cocina de nuestra casa tiene una estufa eléctrica con plancha de porcelana, que no resulta muy útil cuando estás sin energía. Así que procuramos tener una hornilla o estufa de acampar que funciona a gas. El tanque de gas de esta hornilla resulta ser generoso, y tiene un contenedor de metal que no permite verificar el nivel del interior. Cuando estás cocinando, de un instante al otro, te quedas sin combustible a medio cocinar sin ningún aviso previo, si no estás listo con otros tanques de respaldo no podrás terminar de preparar la comida ni tampoco comer. Otras veces, en medio de la noche sin energía nos vemos buscando los cerillos (fósforos) y las candelas para iluminar la casa, resulta muy molesto descubrir que te has quedado sin velas y que tienes varias cajas de cerillos que no sirven para mucho.

Es posible que algunas áreas en nuestra vida, sean tan profundas y arraigadas como la niebla del camino o las flores del jardín o del campo, sin capacidad de resistir ni de perdurar. Nos puede pasar que estemos invirtiendo y apostando toda nuestra vida -sobre el supuesto de nuestro propio estándar o nuestra propia norma religiosa de lo que significa mantener una relación personal con Dios- y que sintamos estar en la máxima calificación disponible. Hasta puede ser posible que todas las personas a nuestro alrededor piensen que efectivamente mantenemos una bonita relación con nuestro Dios. En este caso se trata de un saber o imaginario colectivo. Si extendemos nuestra propia imagen de una bonita relación con Dios a través de medios masivos y de las redes sociales en la internet, y en conferencias a enormes auditorios, en el último minuto podríamos no ser reconocidos por el Señor y quedar fuera. La opinión pública se ha equivocado más de una vez, y las grandes mayorías también, hasta han decretado leyes que contradicen la voluntad de Dios, hasta le enviaron a la cruz.
Podríamos estar caminando sobre fundamento poco sólido e incierto, y sin darnos cuenta. Es altamente riesgoso y peligroso ser solamente "conocidos en la tierra"; bien sea por una pequeña comunidad de creyentes, o bien por toda la comunidad religiosa en todo el planeta, pero en contraste ser perfectos "desconocidos en el cielo" por no mantener una relación constante, cercana y robusta con la persona de Dios.

Entonces el reino de los cielos será semejante a diez vírgenes que tomando sus lámparas, salieron a recibir al novio. Y cinco de ellas eran insensatas, y cinco prudentes.  Porque las insensatas, al tomar sus lámparas, no tomaron aceite consigo, pero las prudentes tomaron aceite en frascos juntamente con sus lámparas. Al tardarse el novio, a todas les dio sueño y se durmieron. Pero a medianoche se oyó un clamor: “¡Aquí está el novio! Salgan a recibirlo.” »Entonces todas aquellas vírgenes se levantaron y arreglaron sus lámparas. Y las insensatas dijeron a las prudentes: “Dennos de su aceite, porque nuestras lámparas se apagan”. Pero las prudentes respondieron: “No, no sea que no haya suficiente para nosotras y para ustedes; vayan más bien a los que venden y compren para ustedes”. Mientras ellas iban a comprar, vino el novio, y las que estaban preparadas entraron con él al banquete de bodas, y se cerró la puerta. Después vinieron también las otras vírgenes, diciendo: “Señor, señor, ábrenos”. Pero él respondió: “En verdad les digo que no las conozco”. Velen , pues no saben ni el día ni la hora. Mateo 25:1-13

La parábola de las diez jóvenes doncellas -vírgenes- nos narra con contundencia de la terrible sorpresa que va a resultar para el grupo de las cinco doncellas relajadas, necias, y sobradamente convencidas de cubrir ampliamente todas las normas, certificaciones y exigencias de su comunidad, y que de pronto descubran que no tienen recipientes para aceite, ni aceite en éste, y que ese detalle las ha dejado afuera. Será oportuno no hacer cuentas con argumentos propios, ni auto complacientes. Habrá que revisar muy bien el manual de Dios, y pedir la ayuda, sabiduría y revelación fresca de su Espíritu para no quedarnos cortos en los comentarios certificados por algún humano.
La posibilidad de ser contado entre los malvados es realmente inquietante, cinco de diez. Cinco de éstas quedaron fuera de la ciudad, estar fuera de la ciudad significa estar en la zona del juicio a las naciones.
Se trata de cinco doncellas imprudentes, que toda su vida vivieron seguras de gozar de una increíble relación con Dios. No se trata de una idea vaga, se trata de su firme convicción y que se reveló falsa cuando sus lámparas no funcionaron en el momento de la prueba definitiva.
Es posible que Usted ya haya experimentado muchos momentos de la verdad. Se trata de esos instantes cuando se define todo o nada. De ser así, conoce que aunque parezca duro, no hay más oportunidades, ni ampliación de plazos, ni espacio para la tolerancia o para sacar el viejo manual de excusas que tanto nos ha ayudado en el pasado. La Palabra de Dios es nuestra lámpara durante el caminar a diario, es nuestra guía, nuestro manual del fabricante. El aceite de la unción es la cobertura del Espíritu de Dios, es la convivencia diaria con Dios mismo, es la relación intima y cercana.
Si gastamos toda nuestra vida en ministrar las manifestaciones espirituales de Dios, o bien, si hemos sido eficaces y constantes heraldos de la salvación que Dios proveyó a través de Jesús, si hemos hecho maravillas en el nombre de Dios con fe y seguridad para liberar a los cautivos de la opresión de los demonios a diario. O bien, hemos dado todas nuestras posesiones a los pobres, hasta nos hemos memorizado el credo y la sana doctrina de la congregación, o bien si nos hemos desarrollado como expertos en cumplir un mandamiento. Y si resulta que "todos nos conocen en la tierra" como intachables líderes. Con todo esto más todos los certificados y logros necesitamos todavía algo más. Ahora mismo, necesito llenar mi propia personal e individual lámpara con "aceite" y asegurarme de recargarla constantemente y verificar que ésta no se quede vacía en medio de la más profunda oscuridad de la noche, cuando ya no será posible compartir un poco para lograr entrar en la hora exacta.

¡Gracias Jesús! por proveer el pago exacto por mi error y maldad, gracias por ser el verbo, la Palabra poderosa que mueve este universo, gracias por enviarnos al otro consolador en nuestro beneficio a recordarnos todas las enseñanzas que nos diste y a capacitarnos en el servicio. Que mi voluntad y mi disciplina se encuentren delante de tu trono a diario, que mi búsqueda de tu rostro sea la excusa perfecta para fortalecer nuestra relación de persona a persona, de amigo a amigo, de siervo a su Rey, de discípulo a su maestro. Que así se haga en mi vida y la de todos tus siervos alrededor del planeta.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Sanidad "Sozo"

¿Estoy disfrutando realmente, de la medida plena y abundante que Dios a previsto compartir conmigo? ¿Será que hay un paso más que debo avanzar en mi relación con mi Dios? Existe un especial interés de parte de Dios en devolver a sus hijos la salud plena. Se trata de cómo puedo vivir con salud física en mi cuerpo, salud en mi alma; mente y emociones, e incluida la salud en mi espíritu. Se puede entender que la buena voluntad de nuestro Padre es que seamos  salvos, sanos y libres . ¿Si en realidad tú crees que hay algo más para ti, continua leyendo? Sṓzō - σῴζω-  es una palabra griega que es frecuentemente utilizada por Jesús durante su ministerio público, esta a su vez deriva de una raíz  indoeuropea   "estar sano, y con buena salud".   Se puede entender como ser o estar pleno, ser completo, o ser íntegro. Ha sido citada 110 veces en los evangelios y otras cartas donde su significado también es salvar, sanar, y liberar (rescatar) . Incluye también protección, defensa, be

Eliminar la amargura

¿Qué sucede en nuestro interior cuando ponemos en pausa la acción de perdonar, cuando no perdonamos y le damos hogar al rencor? ¿Alguna vez has colocado en tu boca algo con sabor amargo y que afecta radicalmente el sabor de todo lo que tratas de comer después? No pierdas de vista lo que produce una sustancia amarga en tu boca. ¿Habrá algo que podamos hacer para quitar esa toxica percepción de nuestro sentido del gusto? Traten de vivir en paz con todos, y de obedecer a Dios; porque si no lo hacen, jamás lo verán cara a cara. No dejen que nadie se aleje del amor de Dios. Tampoco permitan que nadie cause problemas en el grupo, porque eso les haría daño; ¡sería como una planta amarga, que los envenenaría!    Hebreos 12: 14-15 Esfuérzate  por vivir en paz, no te alejes del amor de Dios. No dejen crecer plantas venenosas en medio de ustedes.  De una u otra manera todos y cada uno de nosotros hemos sido víctimas de golpes y de heridas sufridas desde nuestro entorno exterior. Algun

Abriendo los ojos del entendimiento

Lo inextricable trata de problemas, dudas que son muy enmarañados, intrincados y confusos por ello nos resulta difícil de resolver. Vivir sin comprender, tiene que ver con un entendimiento que posee límites. En el diccionario de la RAE dice que es aquello que no se puede desenredar, muy intrincado y confuso. Viene del latín inextricabilis ; aquello que no se puede desenredar. ¿Por qué hay algunas cosas  que  no logramos  entender claramente? " También le pido a Dios que les haga comprender con claridad el gran valor de la esperanza a la que han sido llamados, y de la salvación que él ha dado a los que son suyos. Pido también que entiendan bien el gran poder con que Dios nos ayuda en todo. El poder de Dios no tiene límites; con ese mismo poder. "  Efesios 1:18,19 Bien podemos organizar al ser humano en 3 grupos:  Hombre natural . Su espíritu está muerto y desconectado de Dios.  Hombre espiritual . Está alineado al cielo.  Hombre carnal . Está a medias, a vece